Nosotros no bautizamos pero celebramos la llegada de nuestras niñas como si nos hubiera tocado la lorería. Vamos, que no nos salpicamos con cava, porque me parece una guarrada que si no tambien habría de eso.
Aprovechamos la terracita y que hacía bueno e invitamos a la familia y los amigos a dar la bienvenida al Michin que se lo paso en grande con los abus y cuando se cansó durmió lo que quiso pegadita a mama en su manduca.




Bienvenido Michin. La vida sin ti ya no sería lo mismo. La has cambiado para mejor porque has curado heridas, has devuelto la alegría y hemos vuelto a creer que las cosas pueden ir bien.
Bienvenido Michin, porque tu hermana ya no estará sola y te adora (y tu a ella) y eso confirma que eres el mejor regalo que podíamos hacerle.
Y veros juntas es el mayor espectaculo del mundo.

Una prima, mamá reciente, me llamaba el otro dia para que le recordase marcas de ropa y de vinilos para su peque. Decía eso de "ya ves tu que preocupación" y el remate "quien me ha visto y quien me ve".
Cuantas veces habre dicho yo lo mismo.

Cuando le dije que si a Papá Comino, le avise de que era una mujer moderna que ni planchaba ni cocinaba. Pues sigo sin planchar (por falta de tiempo, basicamente y porque es algo que le gusta hacer a papá) pero, no solo cocino, sino que ademas hago cursos de decoración de cupcakes.

Paula, de Con un poco de azucar, nos explico durante 4 horas los detalles de como manejar el fondant, la buttercream y el glaseado y nos dio unas recetas increibles para hacer unos cupcakes maravillosos. Estos que veis son los de zanahoria y de Guiness y estaban estupendos.
Ahora a buscar tiempo y excusas para aplicar lo aprendido.
Y mira, hablando de esas cositas que hacemos cuando nos hacemos madres os pongo una fotito de las camisetas que tunee hace un par de meses para el comino y el michin.

La versión maternal de aquel que decía "al toque del amor todo hombre se vuelve poeta"